Mineral de sangre, la maldición del Congo.
¿Podríamos decir que nuestras manos están manchadas de sangre por portar smartphones o ordenadores portátiles? ¿Hasta qué punto somos también parte del problema de la Guerra del Coltán? ¿Acaso miramos hacia otro lado mientras los niños y niñas son objetos de esclavitud en las minas del Congo? Puede que nunca nos hayamos preguntado como funcionan todos los aparatos electrónicos que nos rodean, cuáles son sus componentes ni dónde se consiguen, pero es imposible pasar por alto las atrocidades que se consienten en el Congo que acaban con cualquier derecho humano que exista. Una maldición para sus habitantes y una bendición para los que se aprovechan de la riqueza minera del país que parece no tener fin. La República Democrática del Congo es un país rico en recursos naturales, sobre todo en minerales, del cual se extrae cobalto, oro, diamantes, uranio y coltán. El coltán, este nuevo ``oro negro´´ que es producto de la unión de otros dos metales: Columbita y Ta